5/03/2024

San Vicente. Conmoción por el homicidio a golpes de un bebé de 3 años

Momento de la detención de Darío Romero a 40 kilómetros de la zona urbana de San Vicente. Había escapado del hecho. 

Un drámatico caso conmociona a la comunidad de San Vicente, donde una pareja de concubinos son acusados de matar a golpes a un niño de 3 años, producto de reiterados hechos de violencia intrafamiliar.





En un principio la madre de la criatura admitió la culpabilidad de la muerte de su hijo, al declarar que "se paso" en el castigo, pero los médicos, denunciantes primigenios del caso, alertaron a los investigadores de la existencia de contusiones de golpizas anteriores.

La mujer, de 21 años, de nombre María Milagros Acosta llegó con el niño en brazos, sin signos vitales al hospital nivel 3 de San Vicente. Habría muerto por las múltiples lesiones internas. Ocurrió el jueves a las 08.30. 

En el curso de la averiguación de antecedentes de la madre, se avanzó en la determinación de que el padrastro ya tenía 4 denuncias de violencia efectuadas por vecinos de Oberá y una más reciente en la localidad de San Vicente, lugar de convivencia de esta pareja. 

La pareja convivió un tiempo en Oberá, pero a resultas de los malos tratos, la joven Milagros decidió irse a Mar del Plata a la casa de su padre. Sin embargo, los ruegos del concubino, la convencieron de retornar a Misiones para vivir en San Vicente, donde todo culminó con este crimen. 

El hombre, llamado Darío René Romero, de 36 años, ya tiene dos hijos de un anterior matrimonio, sobre los que también ejercía un trato agresivo. Esta persona se dedica a la tarefa y changas circunstanciales como modo de vida laboral. 


El presunto homicida aparentemente dormido en el colectivo



Romero, asustado por la muerte de la criatura, optó por huir y esconderse en el monte, de la Picada Zulma, sobre la ruta provincial 212, a 40 kilómetros del casco urbano de San Vicente, casi en el límite con la localidad de Caraguataí. 

Si bien la madre admitió la culpabilidad directa del homicidio de Atriel Acosta, se está ante la presunción de que el concubino la habría coercionado para que diga que ella lo mató, ya que la joven tiene características de retraso madurativo. 

Los niños - hermanastros del fallecido - de 8 y 5 años respectivamente, quedaron a cuidado de los abuelos paternos.

El cuerpo del bebé está sujeto a la autopsia forense y es reclamado por la abuela materna para darle sepultura en Oberá. 

Con relación a la violencia intrafamiliar, fuentes policiales confiaron a la prensa, que en San Vicente, los calabozos de la Unidad 2da - donde quedan detenidos los encausados - tiene un 65% de presos por violencia de ese tipo.

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Alcides Cruz




2 comentarios:

  1. Triste.Producto de la falta de educación, el consumo de drogas, el dinero facil de AUH, se hacen padres sin ser ellos posibles humanos de ser responsables de sus propias vidas.

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