✅ - Por Alcides Cruz - licencia CC BY 4.0.©
Lo que No le gusta a la derecha-ultraderecha-conservadora-liberal es que los pobres se organicen. Peor aún que piensen. Sin embargo con el peronismo, la clase popular adquirió sabiduría natural pero fundamentada en una doctrina.
De ese modo, los humildes No necesitan grandes preparativos de marketing para sentarse a conversar y retomar la iniciativa. Pueden caer engañados un tiempo pero NO todo el tiempo. Los trabajadores viven la realidad en la piel y en la barriga, en las necesidades insatisfechas de sus familias.
La falta de trabajo, del pan en la mesa, la ausencia de la alegría en los barrios crean el sentimiento de comunidad organizada y un patio puede convertirse en una unidad básica.
Mientras el gobierno cómplice del avasallamiento de Milei en la provincia quiere hacer ver a Oscar Herrera Ahuad hasta en la sopa, los muchachos preparan un choripan, un par de kilos de pan y una gaseosa de tercera marca para repudiarlo en las urnas.
Da lástima ver a "ex compañeros peronistas" confundidos por tanto tiempo, sirviendo a las riquezas de cuatro vivos. No hay que ir a buscar muy lejos a los causantes de tanta corrupción y daño al país.
El detalle mas elocuente es que un peronista puede tener 70 años pero milita como si tuviera 20. Como afirmé al comienzo de esta nota, la organización de los más débiles jamás va a ser entendida por las cúpulas del poder y siempre les va a romper "soberanamente" las pelotas. Un aplauso al compañero Alfredo Alegre de Garupá.
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