El pleno del Concejo Deliberante de Garupá decidió pedir un informe al Departamento Ejecutivo Municipal - entiéndase a la Intendencia - sobre dos puntos centrales que quedaron sueltos e inexplicados del polémico espectáculo ocurrido en la costanera del barrio Fátima.
Se trata de averiguar las condiciones contractuales que celebró el municipio con los organizadores correntinos y la proporcional recaudatoria.
La presentación impulsada por el concejal Chelo Vieyra fue acompañada por el resto del cuerpo luego de sopesar la gravedad de los hechos acaecidos, donde por milagro no hubo que lamentar lesionados, producto del desborde violento de personas que se vieron estafadas ante el corte abrupto del evento decidido por el secretario general de la comuna, Daniel Mendoza.
La única coincidencia entre las partes que intervinieron en el montaje del espectáculo de súper sonido denominado Carreta Treme, fue la insolvencia para cubrir las expectativas dinerarias. De ahí se bifurcan las acusaciones tripartitas entre unos y otros, con denuncias penales de por medio.
Bajo el manto de sospechas de coimas, de irregularidades en el cobro de las entradas, en la seguridad y excesos propios de la desorganización e improvisación sobre la marcha, la situación paso a una etapa de cuestionamientos políticos, con un saldo absolutamente negativo para la imagen de la Intendencia de Garupá.
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