Un plano nacional nos muestra la tendencia a esconder al kirchnerismo para sortear el aluvión mediático de animadversión instalada en su contra por la derecha fachistoide y aporofóbica
El gobierno de Alberto Fernández decidió una política de comunicación esponjosa, serpenteante, camuflada de buenos modales cortesanos.
Los varios frentes internos y externos obligan al gobierno nacional a desdibujar un modelo confrontativo, establecer un blanco móvil permanente, jugar de contragolpe, entregando el centro del ring al adversario.
Por eso cobra significación la compulsa electoral de medio tiempo. El gobierno nacional necesita ganar aunque sea por puntos y retener el título dejando al retador magullado y cansado.
En las provincias se realizan otras apuestas dispares a la suerte del gobierno nacional, porque los gobernadores hacen la suya, bregan por una gobernabilidad individualista, ya que no sienten a Alberto Fernández como el conductor natural sino como personaje transitivo de la época.
Así algunos gobernadores y popes sindicales pusieron a Alberto como jefe del Partido Justicialista para tabicarlo y al mismo tiempo mostrarlo como estampita espanta diablos, antes que rendirle devoción.
Este clímax desapegado de lo nacional se vislumbra en Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Misiones, Santiago del Estero, Tucumán donde los gobernadores protagonizan una fase testimonial de sus administraciones de modo directo o indirecto.
El cimbronazo de Cristina Kirchner al dar un paso atrás en 2019, todavía está acomodando las placas tectónicas de las dirigencias que habían lapidado al kirchnerismo, lo habían llevado hasta la puerta del cementerio y estaban construyendo sincretismos de derecha acomodaticia alrededor de Massa, Pichetto, Schiaretti y Urtubey. Memoria.
Por esa razón en el presente, los líderes provinciales siguen con el resabio de haber velado a un muerto catatónico. En ese llanto seco dejaron que las derechas provinciales, aglutinadas en el macrismo corrupto y entregador del país, aumentaran su caudal de votos.
No defendieron mucho al gobierno nacional de Alberto + Cristina en la pandemia y ahora se la tienen que ver a oscuras para sostener los efectos en lo anímico social y lo concreto económico.
MISIONES.
El gobierno renovador ha conseguido con su machacar "misionerista" un jarabe concentrado de derecha intragable. Su crónica acentuación en el recorte del mapa nacional, ha hecho que la clase media provincial se crea de otra cuna y haga culto del "medio pelo" aspiracional. Como en todas partes unos cien ricos manejan el territorio.
Más rápido que ligero (según cuenta el nuevo "Diario de Irigoyen de la Renovación": Primera Edición) el Gobernador Herrera Ahuad hablo por teléfono con Juan Zabaleta cuando ni siquiera había asumido a su cargo de Ministro de Desarrollo Social.
Lo que le interesa al gobierno renovador es que No se corte el chorro de dinero para financiar el Plan Misiones Trabaja y otros acuerdos firmados con Daniel Arroyo. Otro detalle que quiere evitar es el nombramiento de otro Delegado que responda a Alberto + Cristina antes que a los mandados de Rovira para seguir apropiándose de los recursos que llegan desde Buenos Aires.
Recursos que son tragados por un manto de arena movediza creada en un artilugio de empresas tercerizadas, fundaciones y cuentapropismos adheridos. La perinola es el juego preferido del capricho "misionerista": Todos (el país) ponen, tomo todo.
El rovirato quiere impedir una fuga de poder, controlar siempre el ducto dinerario o conseguir que los funcionarios nacionales se sometan a los formatos locales y nada crezca fuera de su redil.
El misionero de a pie no mira los dientes del caballo regalado y sin embargo sabe que gracias a las políticas sociales de la Nación llega plata a la tierra colorada, mientras el gobierno "misionerista" se llena la boca como si fuera dueño de los programas.
LOS ESCRIBAS "PALA CIEGOS".
Risible es por lo menos lo que resulta de leer las alabanzas de los escribas renovadores. Los ditirambos cuasi periodísticos son ilimitados.
Todas las encuestas ponderan a los candidatos renovadores menos al resto; todo lo que el Gobernador Herrera Ahuad hace es esplendoroso para una consultora bien pagada y es casi de un almirante refulgente; Misiones es un ejemplo mundial de vida comercial y sustento sanitario en pandemia, tal que asombraría a Macron o Angela Merkel. (si uno cree lo que dicen estos medios)
Según la cantinela de los periodistas chequeadictos del oficialismo, todos los renovadores son genios del voto y consagrados a la medalla olímpica de la política, mientras los opositores valen menos que una baratija de La Placita posadeña.
TIERRA CON MALES
Misiones no escapó a la corriente derechosa por obra u omisión. El amorío con el macrismo es un tatuaje difícil de borrar. El verso predicado para el turismo se lo terminó creyendo la población, cuyos anhelos de cantón suizo no coinciden con el 60% de pobreza estructural de la provincia.
Se le llama paz social a la depresión generalizada. Sin la ayuda de fondos nacionales esta provincia sería un páramo. Y luego, la supuesta tranquilidad es paz social en la medida que nadie ose cuestionar o criticar las ocurrencias del mandamás.
(No se sabe si el votante misionero es dormido, miedoso, especulador, aprovechador, resignado, falto de interés, tonto, demasiado pillo, egoísta, cómodo, genio, falso, etc)
Hablan de comercios florecientes y recaudaciones impositivas récord con la frontera cerrada sin contar con la presión que están ejerciendo los empresarios para tirar la manga a la Nación y tratar de que se prolongue lo más lejos posible la apertura de los pasos internacionales.
(Igual cientos paraguayos se las ingenian para pasar el Río Paraná con el contubernio de fuerzas de seguridad de una y otra orilla. parecido ocurre en la frontera con Brasil. Narcotráfico y contrabando nunca cesaron en pandemia).
La justicia es una prolongación el poder omnímodo, a la vez de letárgica e ineficiente.
“El pueblo de Misiones exige de nosotros compromiso, no hay chance, no podemos fallar”, manifestó la presidente del Superior Tribunal de Justicia, Rosanna Pía Venchiarutti Sartori, en la inauguración del Juzgado de Familia y Violencia Familiar N° 1 de Leandro N. Alem.
Pues hay que informarle a la suprema jueza que hace mucho la justicia viene fallando sin remedio. Con tan solo bajar unos pisos del Palacio de Tribunales en la avenida Santa Catalina, descubrirá por sí misma parvas de expedientes amarillos por los años de acumulación.
LA OPOSICIÓN NACIONAL Y POPULAR
La oposición fiel al proyecto nacional y popular tiene que definir con franqueza en estas elecciones si se une del todo o se dispersa dejando que la Renovación haga con ella un felpudo.
Que el Frente de Todos saque un diputado más significará la catapulta a una construcción fortalecida para el 2023; por ello a la Renovación le interesa dispersar los votos contrarios, aumentar la grieta de los dirigentes y bloquear la unidad posible.
Habría que ver si las organizaciones sociales han superado su posición pivotante con el gobierno nacional y definitivamente son parte de la estructuración de un frente común opositor real a la Renovación. No es cuestión de jugar por los cargos electorales y después colocarse en equidistancia de las directrices del gobierno de Alberto + Cristina porque es funcional a la demanda permanente de recursos que engordan su base social pero no fidelizan el voto.
La Renovación No quiere hacer notar que está desesperada por conseguir dos diputados e ir a negociar ventajas en la Casa Rosada. La idea del gobierno "misionerista" es dejar el espacio de "Los Ramones" y pasarse al bloque del Frente de Todos para anular el crecimiento electoral del kirchnerismo en la provincia.
Así proponen para la próxima etapa de arrime, al actual intendente de Oberá, Carlos Fernández que le gusta auto proclamarse kirchnerista (de chafalonía) y a la ex ministra Claudia Gauto que flameó un albertismo inexistente.
Si bien la tendencia general es votar a los espacios representativos antes que a las figuras políticas, la elección del recambio enfila para ese plan de colocar al Frente Renovador como la representación delegada del Frente de Todos bajo el eufemismo de "aliado" en el Congreso Nacional.
Entonces el kirchnerismo o el peronismo real de Misiones (No los apócrifos del gorilismo puertista o de la farsa del entrismo rovirista) debe entender y carnalizar que la unidad del campo nacional y popular No debe ser declamada. Que se acabó el acting y el relajamiento territorial.
Salga quien salga ganancioso en las PASO, el espacio representativo de Alberto y Cristina debe consolidar la unidad de los partidos políticos y de las organizaciones sociales. El tren llega pronto.
No les queda otro en los próximos diez años.
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